Hay quienes dicen que envejecer es inevitable.
Yo prefiero decir que hacerlo con consciencia es una elección.
Y muchas veces, los primeros signos no tienen tanto que ver con la edad… sino con los pequeños hábitos del día a día.
En mi consulta de medicina estética en Bogotá, recibo personas que creen que su piel está envejeciendo “muy rápido”, sin entender por qué.
La respuesta suele estar en detalles tan simples como estos:
1. Tratar la piel con brusquedad
La piel no necesita ser tallada ni castigada.
Usar exfoliantes agresivos, toallas ásperas o limpiadores con alcohol daña su barrera protectora.
Y sin esa barrera, los procesos de envejecimiento se aceleran.
2. Dormir sin retirar el maquillaje
Este es uno de los errores más frecuentes y más silenciosos.
Cuando no limpias tu rostro antes de dormir, dejas que impurezas y toxinas se acumulen durante horas.
La piel se inflama, se congestiona y empieza a perder su luminosidad natural.
3. Olvidar el protector solar
El paso más simple… y el más subestimado.
En la medicina estética avanzada, sabemos que la fotoprotección diaria es uno de los pilares del rejuvenecimiento.
Incluso en días nublados, la exposición a la luz solar y artificial impacta directamente el colágeno, provocando arrugas y manchas.
4. Aplicarte tratamientos sin un diagnóstico profesional
Copiar rutinas de redes sociales o someterse a procedimientos sin una evaluación médica es otro error común.
Cada piel es distinta.
Por eso, en mis consultas, evalúo el estado real de tu piel, tu historia clínica y tus objetivos personales.
Solo así es posible diseñar tratamientos personalizados, como la bioestimulación celular, el uso de láser médico-estético o la armonización facial sin excesos.
5. Vivir con estrés y no reconocer su impacto en la piel
Sí, el estrés también deja huella.
Hormonas alteradas, inflamación crónica, pérdida de sueño… todo esto se refleja, tarde o temprano, en el rostro.
Y en medicina estética, tratamos no solo los signos visibles, sino que también acompañamos procesos de bienestar que promuevan una piel más sana, más viva, más coherente contigo.
La medicina estética no es solo una solución rápida.
Es una herramienta para ayudarte a reconciliarte con tu reflejo, con lo que ves y con lo que sientes.
Si llegaste hasta aquí, es porque algo dentro de ti quiere empezar a cuidarse diferente.
Quizás más elegante.
Más íntimo.
Más consciente.
Te invito a compartir este artículo con quien también sienta que ya es hora de priorizarse.
Y si tienes dudas sobre tu piel, los tratamientos o cómo iniciar este camino, puedes encontrarme en redes como @drnaizir_medestetic o agendar tu consulta en el sitio web.
Porque en mis manos, el cuidado se vuelve arte.
Y tú, lo mereces.
Por el Dr. Fayzal Naizir
Médico especialista en medicina estética avanzada en Bogotá
Buena información !
EXCELENTE . MUY CLARO.